En 30 años, alcohol perdió terreno entre jóvenes costarricenses
Estudios del IAFA muestran una baja sostenida en el consumo de alcohol juvenil. Hoy, la sobriedad gana espacio entre las nuevas generaciones.
Lo que hace tres décadas era habitual, hoy ha perdido vigencia: cada vez más jóvenes eligen no consumir alcohol en exceso, ni mucho menos emborracharse.
A diferencia de generaciones anteriores, entre la juventud actual no beber no es motivo de burla ni exclusión. Hoy se divierten de muchas maneras, sin sentir presión para tomarse algo.
Los datos respaldan este cambio. La Encuesta Nacional de Hogares sobre Consumo de Sustancias Psicoactivas del IAFA muestra que, mientras en 1990 el 39% de la población había consumido licor en el último mes, para el 2002 esa cifra bajó al 33%.
Para Eugenio Regidor, director de Educalcohol Costa Rica, este comportamiento responde a un importante cambio cultural, influenciado en parte por las redes sociales.
“No está de moda el emborracharse, está mal visto, los muchachos consumen alcohol ahora de una manera moderada y eso es una buena noticia para Educalcohol, porque nuestro lema es ese, la moderación es siempre de buen gusto”, dijo Regidor.
Además, algunos expertos consideran que las vivencias personales de muchos jóvenes al observar a familiares alcoholizados podrían haberlos llevado a rechazar ese patrón de consumo.
La sobriedad, en este nuevo contexto, no solo es aceptada: es una forma de vida que gana fuerza entre quienes prefieren divertirse sin excesos.