Eliminación, enojo... y crisis: River no levanta cabeza
La hinchada ha mostrado su inconformismo entonando clásicos cánticos contra el plantel.
River Plate sumó otra decepción a una temporada plagada de frustraciones para Marcelo Gallardo. Eliminados en semifinales de la Copa Argentina el viernes, a los Millonarios solo les queda una opción de título en un 2025 de pesadilla... y en el camino se encontrarán con Boca Juniors.
El modesto Independiente Rivadavia despidió las chances del club de la banda roja cruzada de matricularse en la final. Lo frenó 0-0 en el tiempo reglamentario y lo remató 4-3 en penales, donde el portero Franco Armani, otrora garantía de éxito desde el punto blanco, volvió a pasar de agache para los del Muñeco.
Como le sucedió en varios partidos a lo largo del año, River intentó ser protagonista, pero no jugó bien, se mostró demasiado cansino por momentos y sin la personalidad ganadora que había impuesto Gallardo en su primer ciclo al frente de la entidad.
Entrenador más ganador en la historia de River, con 14 títulos en ocho años y medio de gestión (2014-22), el Muñeco regresó en agosto de 2024 para una segunda etapa pobre en resultados y huérfana de festejos. Y, contra todo pronóstico, el DT ha dejado abiertas las puertas de su futuro.
"Analizaremos al final de la temporada, para lo que faltan pocos meses, cómo seguimos. Claramente, los objetivos hasta ahora no se han cumplido", dijo Gallardo tras la eliminación en la Copa Argentina, en la que dio un monólogo ante la prensa sin permitir preguntas.
"Lo persiguen las eliminaciones".
El presidente de River, Jorge Brito, ha dicho que respalda a su comandante en las buenas y en las malas, pero no ha garantizado por completo la continuidad del laureado entrenador de 49 años, uno de los grandes ídolos del popular equipo de Buenos Aires.
Bajo el mando del Muñeco, River se quedó fuera de la Libertadores 2024 en semifinales y en los cuartos de final este año. Cayó en fase de grupos en el Mundial de Clubes 2025, en cuartos del Apertura 2025 y ahora en la semi de la Copa Argentina.
Ni siquiera logró la modesta Supercopa Internacional, en la que fue vencido en penales por Talleres de Córdoba.
"Si antes los títulos caminaban junto al Muñeco, ahora lo persiguen (y lo atrapan) las eliminaciones", escribió el comentarista Andrés Burgo en el portal de TyC Sports.
"Gallardo sumó varias derrotas de esas que se denominan 'saca técnicos': su proceso se sostiene en el pasado. Desde ya, nadie con memoria puede dudar de que debe continuar en el cargo en 2026 -salvo que él lo decida-, aunque ya no tendrá la red de contención de 2025", agregó.
Gallardo está muy expuesto debido a que pudo contar con los refuerzos que pidió, lo que le costó al club una inversión superior a los 70 millones de dólares, más allá de desprenderse en julio del talentoso Franco Mastantuono, comprado por Real Madrid.
Aceptar la soledad.
Con la corriente en contra, a River solo le queda por delante el Clausura, en el que restan tres fechas, incluida la visita a su archirrival, Boca Juniors, el domingo 9 de noviembre en La Bombonera.
En el torneo tiene la misión de ser campeón o, al menos, obtener una plaza a la Copa Libertadores de 2026 por la tabla anual, lo que podría decidirse en el duelo mano a mano ante el Xeneize.
"Nos queda ver si podemos intentar en estos 40 o 45 días agarrarnos del campeonato, que es la única chance que tenemos para revertir un año totalmente negativo. Con base en eso, analizaremos cómo terminamos el año y después tomaremos las decisiones que haya que tomar", afirmó el DT.
La hinchada ha mostrado su inconformismo entonando clásicos cánticos contra el plantel, que ha tenido puntos muy bajos en algunos hombres experimentados, como el delantero colombiano Miguel Borja.
Gallardo, aclamado e intocable hasta ahora, se desahogó tras la eliminación frente a Independiente Rivadavia.
"En este momento de mierda nadie te espera para darte un abrazo, debemos entender que posiblemente tendremos que atravesarlos solos, porque el fútbol es así", sostuvo.
"Cuando ganás están todos, pero cuando perdés no está nadie. Ahora aceptaremos la responsabilidad nuestra. Este no es un momento para cualquiera".


