Más personal es una necesidad clave para el nuevo director de la Policía de Fronteras
Gerald Camacho asumió el cargo hace dos semanas y enfatiza que el camino para mejorar la seguridad fronteriza está en fortalecer al personal que integra las filas policiales.
A dos semanas de iniciar formalmente su gestión como jefe de la Policía de Fronteras, Gerald Camacho conversó con Teletica.com y reveló los pilares sobre los que pretende cimentar su trabajo al frente del cuerpo policial fronterizo.
Uno de esos pilares, que considera clave y fundamental, es el fortalecimiento del personal. “Una prioridad mía es el potenciamiento de las competencias y de las capacidades del recurso humano”, declaró el jerarca, al tiempo que explicó que sin un cuerpo policial motivado, capacitado y debidamente formado, ni la mejor tecnología ni el más moderno armamento serán suficientes para enfrentar los desafíos actuales en las zonas limítrofes del país.
“He operado con la Policía de Fronteras en el terreno, en el campo, es decir, soy un amante apasionado, crecí desde la parte más básica del elemento policial… nadie me tiene que contar cómo son los pantanos, la selva, las montañas de nuestras fronteras, de nuestro país, porque los he recorrido pie a pie”, señaló Camacho.
Además de su experiencia práctica, el nuevo director aporta una formación académica especializada. Recientemente, culminó una maestría en Ciencias de Defensa y Seguridad Interamericana en Washington D.C., donde compartió con oficiales de alto nivel del continente. “Regreso al país… y me encuentro con una situación que no es la misma que la que yo dejé”, dijo, refiriéndose al complejo panorama actual en materia de seguridad.
El nuevo jerarca admitió que está en un proceso de revisión profunda del estado actual de la institución, en especial en cuanto a los recursos humanos y materiales. Reconoció también las limitaciones estructurales que enfrenta la vigilancia fronteriza.
“Si yo le digo que tenemos un 100% de cobertura, le estaría diciendo que sí, sin embargo, siempre existe el desafío porque todas las fronteras son porosas. No se trata solo de números, se trata también de la calidad de esos funcionarios y funcionarias que van a formar parte de las filas de las fuerzas policiales.
“Creo que esa es una clave en este momento, porque el número de recursos humanos es sumamente importante para dar frente a todos estos desafíos de seguridad”, manifestó Camacho.
Uno de los encargos principales que recibió por parte del ministro de Seguridad Pública, Mario Zamora, es el de mejorar la interoperabilidad entre los cuerpos policiales, especialmente entre la Policía de Fronteras y la Policía Profesional de Migración.
Además, se refirió a la necesidad de fortalecer la relación de trabajo con otras instituciones, incluso aquellas que no son policiales, con el objetivo de lograr “fronteras más seguras”.
Otro de los temas centrales de la entrevista fue el combate a la corrupción. Camacho subrayó que uno de los métodos más efectivos para reducirla es promover una cultura ética tanto en las instituciones como entre la ciudadanía.
“Una de las mejores formas de combatir la corrupción es precisamente calar en la ciudadanía en materia ética y valores”, afirmó. También resaltó la importancia de simplificar procesos institucionales para evitar que los ciudadanos se sientan presionados o tentados a recurrir a medios irregulares.
Respecto a los planes de capacitación y formación de su personal, Camacho reconoció el respaldo que han recibido de aliados internacionales.
“Tenemos un gran apoyo tanto de la Academia Nacional de Policía como de otros entes y también el apoyo de países amigos, como por ejemplo el de los Estados Unidos y Colombia, que son socios estratégicos de la formación y especialización de nuestras fuerzas policiales”, dijo Camacho.
También se mostró convencido de que la motivación y vocación de servicio son características distintivas de los cuerpos policiales del país.
Con 31 años de servicio en las fuerzas policiales, Gerald Camacho asume este nuevo reto con la energía de quien conoce el terreno y el compromiso de quien cree firmemente en el potencial de su gente.
“Mi país ha confiado en mí a lo largo de mi carrera y lo único que yo puedo hacer para el mejoramiento de la seguridad de la ciudadanía costarricense es dar lo mejor de uno mismo. Si el ser humano que está detrás de ese tipo de recursos no es potenciado, no va a evolucionar de la mejor forma”, concluyó Camacho.